La Malinche

Matlalcueye es un volcán extraordinario del Altiplano central de México, es una de las montañas más altas del país, pero también es una diosa, al menos así lo fue en la antigüedad, es la diosa de la falda azul, también conocida como Malintzin, la doncella o Sierra de Tlaxcala, pero el denominativo común hoy en día es La Malinche. La montaña de 4430 msnm es un cono volcánico perfectamente aislado, único en el paisaje del Altiplano, esto la hizo objeto de una lógica ritual compleja, en la que se sumaron factores ambientales como los matices cromáticos que van del azul al verde según la distancia en que se aprecia; además de sus cualidades hidráulicas con manantiales y nublados con lluvias; amén de su ubicación por ser punto de referencia para la observación del movimiento aparente del Sol desde los centros ceremoniales prehispánicos a su alrededor. Todos estos elementos y algunos más que sin duda escapan de nuestra capacidad, le hicieron una montaña única. No son ociosas entonces las referencias que desde la antigüedad se hacen de la devoción que tenían los indígenas en las fuentes históricas del siglo XVI que se presentan en el documental que compartimos en está página de Internet, y en las publicaciones que la fundación Mesoamerican Research Foundation ha promovido y que también puedes consultar en este espacio.